MARCHÓ

Cabe, quizás, atribuir al designio más o menos platónico no despejar la incógnita de la partida, razón de la qual nuestros hombres y sus allegados ya conocen, y con eso sobra.

Sí, Isildur marchó, pero la nave a la cual estos tres argonautas se embarcaron continua su camino con la misma brabura, ilusión y coraje. No vale quedarse ahí. Lo de menos será su presencia física, porque su esencia y energia continuarán en el zurron mogol que alimenta a Pablo y Alberto
mar adentro.


El Alba despuntaba en la capital Uzbeca y dos de los tres menestrales de frontera obligados por una diosa mitológica cualquiera partieron en pos del objetivo inicial compartido. Depositarios , estos, de una técnica superior a la del nivel predominante en lo tocante a la amistad, con el caracter de admiración que ello confiere, el tabú va a transformar a los 3 por añadidura en sempiternos Amigos, vanguardia o reliquia de una maravillosa forma de entender la vida.
El otro, sumido en una transitoria nebulosa de tristeza, marchó hacia otra empresa,tan noble y dura como la de otrora sus acompañantes, aunque menos gratificante.Diós dirá.


Esta separación forzosa ha contribuido a incrementar las fuerzas de los tripulantes amparados por el empireo en su camino hacia Ítaca en las anchas regiones de Asia. Pero dejemos ya, por insignificante, la separación física de uno de los tripulantes, para así, por caminos tortuosos, sorprendentes, duros y siempre felices, desembocar en dos cursos fluviales: Ulan Bator, objetivo geografico inmediato del viaje; y las vivencias-amistad, implícita recompensa gnóstica.

Lo primero se verá en los siguientes capítulos de este cuaderno de bitácora (blog) que sucederan al presente, y que nuestros argonautas se encargaran de relatar de forma apresurada desde alguna posta telegráfica -actuales cibers,a los cuales no muestro simpatia pero reconozco que en esta ocasión han sido de gran utilidad-. Adelanto solo, que el último capítulo, por supuesto, será en la capital Mogola, y además feliz.

Lo segundo, en cambio, no tendrá final ni en el eje de las coordenadas geográficas ni en el de las abcisas temporales. Lo recordarán y evocarán, nuestros amigos, con aire de novela de Marco Polo. Donde hoy tienen su ruta de viajeros hubo entonces una de la Seda,trashumante y nómada, donde hoy un pequeño coche repleto de ilusiones y biandas al borde del infarto, despues la perfecta plataforma para desde ella acometer la ruta "entrañable"-ja sabeis...- de la amistad, la complicidad y la admiración recíproca.


!Este placer de Alejarse!
Madrid, Mar Negro,Mar de Aral,Samarcanda, Tashkent...,Ulan Bator.
Tan lindos... para marcharse.

Sirva la presente, como despedida física debida, cuaderno de dia y declaración de amistad infinita.Casi nada!